Mons. Luis María Pérez de Onraita
Aguirre
Obispo emérito de Malanje
(Angola)
Llevaba 53 años en
Angola, 14 de ellos como obispo de Malanje. El pasado 19 de mayo el Papa aceptó
su renuncia al cumplir 75 años.
Natural de Gauna (Álava),
Mons. Luis María fue ordenado sacerdote en 1957 y, dos años después, fue
enviado a Angola por las diócesis vascas. Tras el estallido en 1961 de la “guerra
de liberación” sufrió en primera persona el desprecio de los colonos
portugueses por defender al pueblo angolano. Una vez conseguida la independencia
tuvo que salir del país a causa de un conflicto entre los obispos locales y
algunos sacerdotes vascos. Pasó unos años en Roma estudiando Sociología y
Filosofía, hasta que pudo regresar a Angola para hacerse cargo de la parroquia
de Precol, en Luanda.
En 1996 fue nombrado
obispo coadjutor de Malanje, sede de la que sería titular dos años más tarde. Allí
le tocó vivir la etapa más dura de la guerra civil. En la que fue su residencia
episcopal se conservan en una vitrina varios trozos de los dos obuses que
cayeron en el propio edificio del obispado.
Sus 16 años de episcopado
han estado marcados por la guerra y por la prioridad que él mismo se dio como
obispo: la educación del pueblo angolano.
Uno de sus mayores logros
fue conseguir que el Gobierno devolviese a la Iglesia las escuelas
nacionalizadas durante la época marxista.
Deja como herencia más de
23.000 niños escolarizados y la rehabilitación de casi todas las estructuras
educativas de la región.
(tomado
de la revista “Mundo Negro”, número 575, julio-agosto 2012, página 15)